Hasta cuando Padre Almeida?

Amigos Anticomunistas,

El período colonial en Quito produjo un sinnúmero de historias, leyendas y cuentos que alegraban la vida de los pobladores de la ciudad. Es así que se dice que en el Convento de San Diego había un cura joven de apellido Almeida, y tenía como afición la juerga y el consumo de licor. Noche tras noche, el joven sacerdote iba a una ventana del convento, para escurrirse hacia la calle en busca de su “hobbie” mas preciado, pero como la ventana era muy alta, se apoyaba sobre los hombros y la cabeza de una escultura de Cristo yacente para poder descender al nivel de la calle. El Cristo, debido al diario abuso que sufría, le preguntaba todas las noches “¿hasta cuándo padre Almeida?”, y el padre Almeida contestaba “hasta la vuelta señor”. En fin, el cuento sigue hasta que una noche, al regresar al convento, luego de haber consumido aguardiente seriamente y de haber tenido una juerga de varias horas; se encuentra con un cortejo fúnebre que pasaba por la calle, sorprendido por la inusual hora de este tipo de procesión y como era un individuo curioso, decidió ver en el interior del ataúd, y al acercarse observó su cuerpo en el féretro. Ese momento se le pasó la borrachera, y corrió rápidamente hacia el convento, y nunca más volvió a salir de juerga por las noches.

Me ha sorprendido enormemente que centenas de años más tarde, Ecuador siga con leyendas como la del Padre Almeida, pero en política. El padre Almeida me recuerda al pueblo ecuatoriano, iluso votante que no hace caso de los cientos de advertencias y amenazas que recibe “ ¿hasta cuándo pueblo ecuatoriano?”. Noches de indomable borrachera, que van siendo décadas ya, de elegir sistemáticamente a la peor opción, y al igual que el Padre Almeida, este pueblo no recapacita ni se da cuenta lo que le está pasando. La visión del Padre Almeida de su propio cadáver dentro del féretro, me recuerda al Ecuador de hoy. ¿Qué puede ser peor que el comunismo? ¿Qué puede ser peor que una dictadura que no respeta a nadie ni a nada con tal de cumplir su misión? ¿Qué puede ser peor que un pueblo mal agradecido que cierra los ojos ante la injusticia, abuso y maltrato a gente de bien? “¿hasta cuándo padre Almeida?” Ecuatorianos, pueblo de cadáveres camino al cementerio, pueblo arrogante con la ignorancia que no es capaz de ver que de la procesión con un muerto, lo que sigue es el entierro. Cuba fue enterrada hace 50 años y Ecuador sigue en su cortejo fúnebre.

¿Hasta cuándo vamos a aguantar a un dictador arrogante e impresentable?

Ahora, Correa decidió echar su aparato de corrupción y poder encima de uno de los más destacados ecuatorianos que ha servido al Ecuador, y me refiero al Doctor Edgar Terán Terán. El fiscalito de tercera, de apellido Trujillo, empleado y esbirro del fiscal Pesantes, y éste último el servil mequetrefe que atiende a Correa, ha llamado a un proceso indagatorio al Doctor Terán, y me temo que procedan a emitir medidas cautelares en su contra.

“¿hasta cuándo padre Almeida?”

Quiero transcribir una nota escrita por el Dr. Terán, y adjunto a la presente TODOS los documentos que son parte de esta pantomima montada por Correa, en ejecución de sus serviles fiscalitos.

Atentamente,

Pedro Oliva
Un Ecuatoriano Responsable
www.ecuadoranticomunista.blogspot.com

“Se pretende que hay delito contra la seguridad del estado por opiniones mías en el Canal 1, el pasado 23 de julio.

Usted verá que esas opiniones no sólo no afectan a la seguridad del estado, sino que alertan sobre los riesgos que pueden sobrevenir al Ecuador por la concordante prueba de vinculaciones, encubrimientos y complicidades, de funcionarios y agentes del gobierno con las FARC. Que han sido descubiertos o expuestos por investigaciones y análisis periodísticos en Ecuador, en Colombia y en otros países.

La Fiscalía, en cambio, viene actuando con pies de plomo cuando se trata de investigar los delitos contra la seguridad del estado cometidos por los agentes del gobierno y su multitud de contactos con las FARC, grupo terrorista y narcotraficante.

Se comenzó con una citación a comparecer que me hizo un fiscal de delitos contra la propiedad. Concurrí, y advertí que se trataba de encontrar alguna figura de delito contra la seguridad del estado en lo que opine en el Canal. Contesté las preguntas del fiscal y le hice notar tres hechos fundamentales: primero, que la libertad de expresión es derecho humano del que nadie puede ser privado. El Fiscal General había declarado ante medios de comunicación que no toleraría a personas que presumen de internacionalistas creerle al mono jojoy mas que “a nuestro Presidente”; y que los perseguiría, pero no a los políticos ni a los periodistas porque ellos si “tienen derecho a disentir”. Segundo, que el Ecuador está obligado por más de veinte tratados y convenios internacionales a perseguir al narcotráfico y al terrorismo y a no encubrirlos ni ampararlos. Y tercero, que los propios Ministros de Gobierno y Relaciones Exteriores han entregado a los medios un supuesto diario de Raul Reyes, conocido por la Fiscalía desde meses atrás.

Presenté un alegato con muchos anexos que probaban mis afirmaciones, e inclusive el hecho de que el Ecuador podría ser denunciado por el gobierno de Colombia por su protección a las FARC. De nada sirvió. El fiscal se dirigió al juez de lo penal y el día 9 de septiembre, a las tres de la tarde, se cumplirá la audiencia de formulación de cargos, cuya postergación no se ha resuelto, a pesar de mi pedido por ausencia física, ante el Juez Primero Penal. Mis abogados harán sus exposiciones, aparte de que en el proceso constan los alegatos y anexos que le envío a usted por este medio.

Puedo imaginar que se busca convertir este caso en emblemático para cualquier persona que se atreva a usar su derecho humano a la libertad de expresión en algo que moleste al dictador, sus agentes o sus verdugos.

No encuentro otro antídoto ante este arrase de los derechos humanos.”

Dr. Edgar Terán Terán